
Atlético Nacional vivió una noche agridulce en el estadio Atanasio Girardot, en el partido de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores frente a Sao Paulo. El conjunto colombiano empató 0-0, pero lo que marcó la historia del encuentro fue la inusual y dolorosa estadística: Edwin Cardona falló dos penales en momentos clave, permitiendo que el arquero visitante, Rafael Pires, se convirtiera en el héroe de los brasileños.
Desde el pitazo inicial, Nacional, que vivió un mal rato días atrás en la Liga betPlay, tomó la iniciativa, consciente de que la localía era una ventaja que debía aprovechar antes del viaje a Brasil. La intensidad, sin embargo, se encontró con un muro en el arco paulista. El guardameta Rafael Pires tuvo una de esas noches memorables que se quedan en la memoria de los hinchas, atajando no uno, sino dos cobros desde el punto blanco ejecutados por el mismo jugador: Edwin Cardona.
El primer penal llegó en la primera mitad, cuando una falta clara dentro del área fue sancionada por el árbitro. Cardona tomó el balón con seguridad, pero su remate fue adivinado por Pires, que se lanzó a su derecha para mantener el marcador en cero.
En el segundo tiempo, la historia volvió a repetirse: otra infracción dentro del área, otra oportunidad para Cardona, y otra vez el arquero brasileño le negó el grito de gol. Esta vez, Pires se lanzó al lado contrario, mostrando que no solo estudiaba al cobrador, sino que estaba en una noche iluminada.
Un final amargo para Cardona
A medida que avanzaban los minutos, el Atanasio Girardot comenzaba a sentir que el partido se le escapaba de las manos a Nacional. El equipo dirigido por Marcelo Gandolfi intentó por todos los medios abrir el marcador, pero entre la defensa sólida de Sao Paulo y la actuación monumental de su portero, la ilusión de ganar en casa se desvanecía.
El momento más emotivo llegó en el minuto 85, cuando Edwin Cardona fue sustituido por Billy Arce. Antes de dejar la cancha, el volante levantó la mano en señal de disculpa a la hinchada, consciente del impacto de sus fallos en el resultado. Luego, caminó lentamente hacia el banquillo, con el rostro desencajado y la mirada baja, evidenciando una mezcla de tristeza y frustración. Sus compañeros intentaron animarlo, pero la desazón era evidente.
Todo se definirá en Brasil
El empate deja la serie completamente abierta, pero ahora Atlético Nacional, que sufrió dura sanción, tendrá que buscar la clasificación en suelo brasileño, en un estadio históricamente complicado para los equipos colombianos. La tarea no será sencilla, y la efectividad frente al arco será clave para no lamentar lo sucedido en Medellín.
En el cuerpo técnico y el plantel, el mensaje es claro: pasar la página y concentrarse en el partido de vuelta. Pablo Repetto tendrá que evaluar si mantiene a Cardona como encargado de los penales o si decide cambiar la estrategia para aprovechar cada oportunidad que se presente.
La lección para Atlético Nacional
Más allá de los penales fallados, Nacional demostró que puede competir de igual a igual contra un gigante del continente como Sao Paulo en la Copa Libertadores. La presión alta, el orden táctico y la generación de juego por las bandas fueron puntos positivos, pero sin goles no hay premio.
En Brasil, el margen de error será mínimo y el peso de la localía estará del lado del rival. Nacional deberá apelar a su jerarquía internacional, a la fortaleza defensiva y, sobre todo, a la eficacia que le faltó en Medellín si quiere avanzar a los cuartos de final de la Copa Libertadores.